Normalmente los tratamientos duran 35 minutos, que se reparten en una sola área de trabajo: abdomen, glúteos, zona externa o interna de la pierna. En cada sesión, hay una reducción de volumen de unos 2 a 8 cm.
Las sesiones se deben realizar cada 72 horas, tiempo necesario para que el organismo elimine la grasa. Se recomienda realizar entre 6 y 12 sesiones, dependiendo de la zona tratada y del estado del paciente.
Permite resultados visibles a partir de la tercera sesión y con un efecto duradero. Se trata de un sistema que asegura eficacia y estabilidad a lo largo del tiempo.